El Instituto de Planificación y Promoción de Soluciones Energéticas para las Zonas No Interconectadas -IPSE-, promueve en el Día Mundial, la Eficiencia Energética





El organismo hace una invitación para que todos los usuarios aprovechen la energía de manera sustentable, es decir, sin afectar la disponibilidad de este recurso para satisfacer las necesidades de las generaciones futuras.

Bogotá, D.C. 5 de marzo de 2014 –  Con motivo del Día Mundial de la Eficiencia Energética, el Instituto de Planificación y Promoción de Soluciones Energéticas para las Zonas No Interconectadas  -IPSE-, resalta la importancia de hacer un uso adecuado de este recurso logrando mayores beneficios a través de menores consumos.

Existen cinco frentes de acción que contribuyen al consumo responsable de la energía:

1. Reducción de emisiones

2. Promoción de Fuentes No Convencionales de Energía  -FNCE-

3. Reconversión tecnológica.

4. Medición de variables energéticas

5. Capacitación a las comunidades

De esta manera, el IPSE, promueve los proyectos de eficiencia energética, con el fin de reducir la dependencia de combustibles fósiles en las Zonas No Interconectadas del país y disminuir la emisión de gases nocivos al medio ambiente.

El proyecto híbrido solar-diésel en Titumate – Chocó, es un caso de éxito en el que se presta el servicio de energía 24 horas al día, de las cuales 6 horas se generan con combustible diésel y las otras 18 horas a través de tecnologías fotovoltaicas.

Como éste, otros proyectos también están diseñados con el objetivo de reemplazar los combustibles diésel por fuentes de energía limpia y aportar a la sostenibilidad ambiental.

¿De qué manera se puede utilizar la energía con eficiencia ?

Eficiencia Energética es también la capacidad de utilizar una menor cantidad de energía en su transformación en iluminación, calor, transporte y otros servicios energéticos.

La eficiencia se entiende erróneamente como ahorro de energía; sin embargo, el ahorro se encuentra más en los hábitos diarios de su utilización y en la mentalidad del consumidor.

Por ejemplo, el consumo energético de una vivienda se puede reducir a través de una construcción bioclimática, la elección de equipos de refrigeración, electrodomésticos e iluminación, más eficientes y la modificación de los hábitos de consumo de sus habitantes, todo esto ligado a menores costos en la facturación.

En este sentido y de acuerdo con las políticas y normatividad vigente, el IPSE definió el programa de Uso Racional y Eficiente de la Energía, el cual se aplica en las instalaciones de la entidad para reducir el consumo, principalmente a través de la utilización de bombillas de alta eficiencia, inspección tecnológica para el buen funcionamiento de instalaciones y equipos y socialización de buenas prácticas a fin de crear conciencia de la importancia de este valioso recurso.





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