Indignación por exhibición de pierna de soldado amputado por mina
Tras conocer lo sucedido, el Ministro de Defensa se refirió al Eln como "ratas humanas".
Por: CÚCUTA |
Foto: Archivo particular
Edwar Ávila nació en Armenia, está casado y tiene una hija de 8 años.
La aparición de los restos de una pierna que le fue amputada a un soldado por una mina del Eln, colgados en la malla de un colegio de Convención (Norte de Santander), generó el rechazo de los habitantes de este municipio y del presidente Juan Manuel Santos y del ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón.
La explosión ocurrió el miércoles en la mañana, cuando un grupo de militares vigilaba la construcción de un parque infantil, cerca del centro educativo.
En el hecho, el suboficial del Ejército Nacional, Edward Ávila, perdió las dos piernas y fue trasladado a Bucaramanga para recibir atención especializada.
Luego del ataque, los pobladores hallaron colgados parte de los restos de una de las piernas en la malla del colegio 19 de Febrero y alertaron a la Personería del Pueblo. (Lea también: Gobernador de Norte de Santander alarmado por instalación de minas en cascos urbanos)
"Se encontraron las partes exhibidas, pero no se sabe quién ni en qué momento las puso en ese lugar, se presume que fueron los autores del atentado", dijo un poblador.
La Defensoría del Pueblo emitió un comunicado y rechazó el hecho. “La entidad recibió información según la cual, no conformes con las graves heridas que significaron la amputación de las extremidades inferiores a un suboficial del Ejército, exhibieron una de sus piernas como trofeo en un colegio contiguo al lugar de los hechos”, dijo.
Ante esto, el presidente Juan Manuel Santos, a través de Twitter, condenó el hecho. “Colombia entera repudia y condena atrocidad de Eln. Nos llena de vergüenza y dolor!”, manifestó.
El ministro de Defensa, Juan Carlos Pinzón, reaccionó y se refirió al Eln como “ratas humanas”.
“Ratas humanas por andar disfrutando semejante hecho tan absurdo. A esa gente le espera o una tumba o una cárcel. Quien conozca a esos bandidos del Eln, que denuncie. Ratas humanas es lo que hay en el Eln”, dijo con vehemencia el ministro Pinzón.
‘Tengo ánimo para seguir con la vida’
Por otro lado, el suboficial Ávila, en diálogo con 'Blu Radio', señaló: “Estaba realizando un procedimiento de despeje, recuerdo que di el paso, escuché la detonación, vi mis piernas destrozadas, recuerdo perfectamente el esfuerzo de mis compañeros por evacuarme del lugar”.
Así mismo, indicó que la mina se encontraba muy cerca de una vivienda del sector. “Las adversidades en un militar fortalecen mucho, me ayudan para ser más fuerte en la vida. Solo perdí las piernas y no perdí la vida, tengo mucho ánimo para seguir con la vida”, dijo Ávila.
La Defensoría condenó estos actos "degradantes" que, además, pusieron en riesgo a la comunidad, particularmente a los niños que habitan en esa región del país, y expresó su admiración y solidaridad con el uniformado, que valientemente protegió a los pobladores en medio del incidente.
Ante esta situación, la Defensoría del Pueblo pidió estimular la colaboración ciudadana para capturar a los responsables del ataque y asegurar un castigo severo por parte de la justicia, teniendo en cuenta la "sevicia e indolencia con la que actuaron".
Así mismo, señaló que de comprobarse la autoría del Eln, se trataría no solo de una infracción al Derecho Internacional Humanitario, sino de un episodio claramente contradictorio con el discurso de paz que viene manejando ese grupo armado ilegal de cara a los diálogos exploratorios con el Gobierno.
La Defensoría insistió en la necesidad de poner fin a esta dolorosa práctica, así como en la importancia de que como resultado de un posible acuerdo para poner fin a la confrontación armada, sean estas organizaciones las primeras en contribuir con el desminado y la eliminación total de estos artefactos letales e indiscriminados. (Vea también: Homenaje de EL TIEMPO a víctimas de minas antipersona, en imágenes)
Por otra parte, también se conoció que en Antioquia, Luis Daniel Toro, una joven figura promesa del ciclismo de ese departamento, perdió las piernas en un campo minado de Ituango el pasado lunes, donde prestaba servicio militar.
"A mi niño le tuvieron que amputar las dos piernas", dijo Teresa Yepez, abuela del joven y quien lamentó el hecho.
Benhur Zapata, entrenador de Toro, dijo que era un ciclista entregado al deporte, disciplinado y que no se rendía ante los problemas. "Tenía todas las capacidades para ser un gran ciclista", dijo.
CÚCUTA
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