Recuerdos del Crimen de un Embarrador
En La Pluma del Periodista Marcos Antonio Barros Pinedo
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| Marcos Antonio Barros Pinedo |
Fue tal día como hoy, 24 de febrero, pero hace 46 años.
El sábado 23 de febrero de 1974, Reginaldo Bernier Escudero no era la misma persona alegre, acostumbrado a mamar gallo. Se mostraba triste, inquieto, sin estado anímico y sin sentido del humor.
De manera inesperada, 'Piade' había tomado la decisión de no disfrazarse de 'Embarrador', al día siguiente, Domingo de Carnaval.
Sin embargo, a las siete de la noche, cuando pasó por la Calle 12 con Carrera 11, encontró una parranda al son de la música vallenata, en casa de unos amigos enmaicenados. Lo llamaron para que se sentara a compartir la alegría del Sábado de Carnaval. Entonces, le brindaron un trago de Old Parr y, él 'se lo pegó'.
Esto lo motivó a salir de su mal estado anímico. Solicitó a sus amigos que le bajaran el volumen al equipo de sonido para manifestar que no entendía el por qué había tomado la decisión de no embarrarse, pero con el trago que le brindaron y se había tomado, la motivación era otra, teniendo en cuenta que iba a cumplir 10 años de estar embarrandose durante los Domingos de Carnaval, -y claro-, la Tradición de 'Los Embarradores', estaba por encima de su cualquier estado de desmotivación.
La parranda siguió y se formó el desorden carnavalero con la llegada de un buen número de muchachas hermosas, que dieron rienda suelta a la alegría y el jolgorio. Reginaldo bailó y se divirtió hasta las dos de la madrugada, pero cuando se estaba despidiendo de sus amigos, la parranda dió un giro de 180 grados en materia musical. Cambiaron la música vallenata por una ranchera mexicana, titulada 'Estoy enterrado vivo'.
'Piade' le gritó al que estaba poniendo la música que quitara la ranchera, porque no había motivo para ello, ya que estaban en Carnaval, y acto seguido anunció:
"Me voy muchachos. Les agradezco que me hayan invitado a esta parranda, y por su amable atención. Debo ir a la casa a buscar el saco y la careta para luego trasladarme a la Laguna Salada, a disfrazarme de Embarrador.
Me voy a echar barro del bueno como riohachero que soy, a quienes nos gusta disfrutar y vivir el Carnaval. Sigan divirtiéndose ¡Pero por favor, la ranchera mexicana no pega, en una madrugada de Carnaval!".
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| Reginaldo Bernier Escudero |
"Te quiero mucho. Me voy con Dios para la Laguna Salada. Me voy a integrar a la 'Tropilla de Los Embarradores'. El domingo de Carnaval es muy especial para mí, porque me hace sentir orgulloso de haber nacido en la tierra del almirante José Prudencio Padilla".
'Piade' salió raudo hacia la Laguna Salada, a las tres de la madrugada del 24 de febrero de 1974.
En la 'Zona de Embarre', lo esperaban sus compañeros para felicitarlo por estar cumpliendo 10 años de pertenecer a 'La Tropilla de Los Embarradores'. Brindaron con 'Aguardiente Antioqueño', y luego procedieron a cumplir con el 'Rito de Embarrarse'.
Reginaldo, una vez embarrado, en compañía de más de 100 compañeros, se dirigió al centro de la ciudad, con el fin de cumplir con el objetivo de todos los años: embarrar a quienes encontraran en el camino, penetrar a las casetas, llegar a los bailes populares y a los clubes sociales para abrazarse con la gente y dejar la marca del barro, entre los bailarines, según la tradición.
Es importante señalar que para esa época ya estaba arraigado que el Domingo de Carnaval,se realizara 'El Pilón de Los Embarradores'. Lo cierto es que no existe duda de que Dios es dueño del destino de todo ser humano, y para la muestra un botón:
Reginaldo fue invitado por un amigo a que se quedara tomando trago en una de las casetas, y no aceptó porque quería seguir con el 'Juego del Carnaval', embarrando a la gente del hoy Distrito de Riohacha.
Sólo se quedó unos minutos más, al escuchar una canción interpretada por 'Los Hermanos López' en la voz de Jorge Oñate: 'Los Tiempos de las Cometas'. Cuando finalizó dicha melodía, miró hacía el firmamento, como ido de la realidad.
Al verlo en tal situación, uno de sus amigos le preguntó: "¿Piade", qué te pasa?". El respondió: "Nada. Nada hermano. Solo sé que estoy contento y emocionado".
Se puso la careta y con los brazos abiertos exclamó: "Soy y seré embarrador hasta que mi cuerpo aguante, o hasta que Dios me quite la vida".
Cuando expresó aquellas palabras el mismo amigo le dijo: "Piade, por qué te expresas así? Tú tienes mucha vida por delante. Contigo habrá Embarrador para mucho rato".
Reginaldo abandonó la caseta, y por las calles de la ciudad siguió embarrando a la gente que encontraba a su paso, hasta que llegó a la esquina de la Calle 10 con Carrera nueve.
Allí, actúando de manera desprevenida, intentó embarrar a un transeúnte. Éste no quería que lo embarraran, y reaccionó, sacando un arma de fuego.
Cuando 'Piade' vio la intención y el comportamiento agresivo del parroquiano, se quitó la careta y le dijo: "¡No me mates. Soy yo. 'Piade'...!
La súplica no le valió, porque la persona llena de intolerancia le disparó a quemarropa, quitándole la vida de manera instantánea. El crimen se produjo pasadas las cuatro de la madrugada.
La noticia del crimen corrió como pólvora por todos los rincones de la capital del departamento de La Guajira. Enseguida todos los miembros de la 'Tropilla de Los Embarradores' y los integrantes de la Junta Central del Carnaval, acudieron al lugar donde yacía sin vida, el cuerpo de su compañero, Reginaldo Escudero Bernier.
De inmediato la programación de la fiesta quedó suspendida. Ni siquiera se realizó el tradicional Entierro de Joselito Carnaval, en señal de duelo y rechazo a la intolerancia que siempre ha imperado en Riohacha.
Se señala que el homicida fue identificado por las autoridades competentes, pero nunca fue capturado, -y por lo tanto-, el crimen quedó impune.
La verdad es que el asesinato de Reginaldo Bernier Escudero hace parte de un Capítulo Triste de la Historia del Carnaval, y por lógica de la Tradición de 'La Tropilla de Los Embarradores', de Riohacha.
Cabe recordar que en el seno de la Junta Central del Carnaval de la época, después que se le dio cristiana sepultura a Reginaldo Bernier Escudero, se dividieron las opiniones entre los que estaban de acuerdo y los que querían que 'Los Embarradores' desaparecieran de la programación del Carnaval de Riohacha.
Al final, imperó el sentido común, porque el mejor homenaje que se le podía rendir a 'Piade', sería continuar con la Tradición de 'Los Embarradores, el Domingo de Carnaval.
Y a fe que ha continuado, tal como sucedió ayer domingo 23 de febrero , cuando se realizó 'El Pilón de Los Embarradores', con la presencia de la Reina Central del Carnaval 2020, Jaddys Móvil Laguna.
De esta manera se le pone de presente a las actuales y futuras generaciones que el sacrificio de la vida de 'Piade', a causa de una bala asesina, no ha sido motivo para declinar. Antes por el contrario, la Tradición de 'Los Embarradores' sigue vigente, y hace parte del Patrimonio Cultural del Distrito de Riohacha, La Guajira y Colombia.
Reginaldo Bernier Escudero había nacido el 14 de noviembre de 1945, en el Distrito de Riohacha. Sus padres fueron Asclepiades Bernier y Margarita Escudero. Cumpliría 29 años. Fue un deportista a carta cabal.
Han pasado 46 años desde que se produjo el crimen de Reginaldo Bernier Escudero, a quien los riohacheros de antaño siempre recuerdan cada madrugada del Domingo de Carnaval. Ese Domingo de Carnaval que mientras mucha gente duerme plácidamente en 'los brazos de Morfeo', otros les dan rienda suelta a la alegría en medio de 'El Pilón de Los Embarradores'.
¡Qué lástima! Hay momentos que en nuestro querido Distrito de Riohacha, a decir verdad, la vida no vale nada. Por culpa de una actitud intolerante, 'Piade', descansa tranquilo en su última morada... Y ¡Pare de Contar!
Que bueno recordar, hace parte de la historia de Riohacha y nuestra generaciones tambien la conozca excelente gracias
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