La Negra Más Grande de Colombia
Cada vez que se hable de Colombia y sus valores artísticos, su nombre estará vivo entre los elegidos por la naturaleza misma del arte nacional, en donde ella tiene un lugar especial.
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| Félix Carrillo Hinojosa |
Las personas no son grandes por el color de su piel, ideología religiosa o política, sino por el talento, don de gente y las ganas que tienen en su interior para defenderlo. Ella creció en un hogar conformados por caucanos. Una madre ama de casa, con profunda vocación evangélica y un padre agricultor de cacao, minero y católico.
Era la penúltima de nueve hermanos. Con 18 años decidió irse a buscar sus sueños, ante la invitación del andariego buscador de caminos Manuel Zapata Olivella, quién vio sus capacidades y tiempo después, le envió los pasajes para que se embarcara en la ruta del arte, de la cual, no se desprendió jamás.
Ingresó al ballet de Delia Zapata Olivella con el que recorrió diversos auditorios, desde Francia, China, Unión Soviética, Alemania. A su regreso, grabó para Sonolux su primer LP 'Cantos de mi tierra y de mi raza', dirigido por Hernán Restrepo Duque, quien la bautizó con el nombre artístico 'La Negra Grande de Colombia', con el que se inició un recorrido de más de 30 LP, que la llevó a participar en el Festival OTI en 1975, con la obra 'Campesino de Ciudad', obra de Eduardo Cabas y Alfonso de la Espriella, donde ganó como mejor intérprete.
El mayor logro lo obtuvo al grabar 'Mi Buenaventura', 'Yo me llamo Cumbia', 'El Pescador', 'Chocoanita' y 'Mi Cafetal'. Su capacidad actoral ha sido expuesta en diversas series, dirigidas por valores nacionales e internacionales, entre ellos, Enrique Buenaventura, Fanny Mickey, Pedro Martínez, Bernardo Romero Pereiro, Carlos Mayolo Bernardo Bertolucci, de actores como Trinity, Bud Spencer y Franco Nero.
En 1998 fue tentada por la política y salió representante a la Cámara, por Bogotá, en representación del Partido Liberal. Luego lo hace por las Comunidades Negras, donde obtiene una modesta votación.
Cada vez que se hable de Colombia y sus valores artísticos, su nombre estará vivo entre los elegidos por la naturaleza misma del arte nacional, en donde ella tiene un lugar especial.
Son más de seis décadas, que le permitieron con esa voz distinta, mostrar los diversos ritmos que tiene la patria, los cuales fueron recogidos sin distingo de ninguna clase. Escuchar bundes, alabaos, cumbias, currulaos sumado a su fuerza actoral, nos brinda la oportunidad de ver a una artista integral, nos ha representado con la dignidad de ser colombiano.
Todo eso ha permitido que diversos gobiernos nacionales, departamentales y municipales, hayan exaltado su actividad artística con las máximas condecoraciones que su pecho merece portar. Ella representa con altura, todo ese sustrato cultural que la gente de a pie, construye.
Su más reciente homenaje lo recibió a través de la serie 'Leonor', desarrollada por un canal de su región, donde en seis capítulos de media hora cada uno, con todo el talento natural de su cultura étnica, lograron rendirle un tributo en vida, a quien nos ha dado gloria.
Esa serie es el reflejo vivo, de la misma jovencita que junto a sus siete hermanos vivían una vida, que no era la que quería vivir. Su coraje la llevó a tantos escenarios y a convivir con diversas culturas, que hoy con los años que la vida le ha dado, en un reflejo de ese bello retorno que a muchos le brinda la vida misma, para vivir en el mismo entorno de donde se marchó para demostrarse a sí misma, que su talento no era flor de un día, sino el empuje vigoroso de su raza, de su gente que tiene el talante para sentirse orgulloso como ella lo hace. Con sus dos hijos, nueras, nietos y bisnietos, su vida está llena de felicidad.
Ella es un buen ejemplo para mostrársela a esta, y a las generaciones que han de surgir, que cada vez que quieran revisar el pasado, encontrarán unas grandes páginas que llevan su nombre.
Fercahino (Leonor González Mina nació en Robles, Jamundí, Valle del Cauca, el 16 de junio de 1934). #relatosfercahino
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