Francisco Justo Pérez van-Leenden: el maestro

Por Gladis Marina Brugés Moreu

Bibliotecóloga y archivista Universidad de La Salle, (Bogotá)
Especialista en Cultura y Sociedad en América Antigua, (Universidad del Valle)
Exdirectora del Centro de Información sobre Grupos Étnicos (Cige), de Uniguajira


“Nuestro amigo está en un lugar donde todos iremos algún día, por ahora se nos adelantó y nos deja el grato recuerdo de una amistad tan valiosa e inolvidable

De izquierda a derecha: Jorge Viecco Peñate, Francisco Justo Pérez van-Leenden, Gladis Brugés Moreu, Ninette Brugés Ruiz y Pedro Brugés Campo. (Fotografía archivo personal Gladis Brugés Moreu)

Francisco Justo consideraba que dirigir trabajos de investigación, se convertía en “ganar-ganar conocimientos”, así como él daba parte de sus conocimientos, la persona lo hacía de igual forma.

Se convirtió en un maestro para unos y en un ‘mesías’ para otros porque con sus orientaciones rescató a muchos que querían desertar de sus estudios e investigaciones. Fue solidario e incondicional en sus asesorías oportunas cada vez que lo ameritaba.

Desde niña sentí admiración por las personas dedicadas a escribir y publicar sus obras. Deseaba estar dentro de ese mundo y debía prepararme para hacerlo.

Por eso quise capacitarme al respecto, y se dio la oportunidad de realizar el diplomado Gestión Cultural con énfasis en Investigación, dictado por la Universidad de La Guajira y el Fondo Mixto para la Promoción de la Cultura y las Artes de La Guajira, donde uno de los profesores era Francisco Justo Pérez van-Leenden.

A partir de entonces, me dije: “Ahora sí, voy a iniciarme en esta labor”. Los archivos reposan en su computador.

En marzo de 2001, con los profesores Onésimo y Francisco Justo Pérez van-Leenden (miembros de la familia Brugés), nos reunimos por las noches, después de la jornada laboral.

Fueron muchas las lecturas y reflexiones vividas en común durante cuatro años consecutivos que nos llevaron a iniciar el trabajo Genealogía del mestizaje, desafortunadamente hubo inconvenientes que no permitieron su culminación.

Nace la idea de escribir un libro

Paralelamente compilaba vivencias de mi padre y de la familia Brugés, pensando en publicar un libro. Al comienzo no sabía cómo hacerlo y encontré el camino en la ‘Metodología de Investigación Etnográfica y Genealógica’.

Inicialmente, la idea era publicar un volumen con la información suministrada sobre la familia Brugés en general y un capítulo dedicado a mi padre.

Como la familia Brugés en Colombia es una sola y existe un número bastante inmenso de miembros vivos y difuntos, era difícil compilar toda la información en poco tiempo.

Quería que mi padre, Pedro Antonio Brugés Campo disfrutara del lanzamiento, porque estuvo lúcido hasta el final. Entonces publiqué solo ‘su travesía vital’, en un evento realizado el 1° de abril de 2009, día que cumplió 99 años. Falleció cuando faltaban 33 días para completar un siglo de existencia.

Después del lanzamiento del libro ‘Entre la Vela y el Ancla: travesía vital de Pedro A. Brugés Campo’, surgieron otros proyectos de investigación, con la información compilada durante muchos años.

El 15 de noviembre de 2016, se hizo el lanzamiento del libro, que consta de tres tomos: El Cige: Identidad Cultural de Uniguajira y Apoyo para los Grupos Étnicos. Esta publicación fue el resultado del esfuerzo intelectual y económico y se constituyó en un obsequio para esta dependencia de la alma mater, .

Son varios los trabajos que están en proceso de elaboración. En estos tres últimos años, se ha trabajado especialmente en dos de ellos: Diccionario biográfico de antiguos maestros, escritores e investigadores oriundos de La Guajira - Maesin Wajiira’ y Los Brugés en Colombia.

Son adelantados de forma simultánea. A medida que avanzaban alguno de ellos, el profesor e investigador Francisco Justo, los miraba de forma somera y me hacía algunas sugerencias.

Constantemente intercambiábamos ideas sobre las publicaciones que estaban en curso, pues él mostraba interés en estas temáticas. Se le notaba la pasión por su contenido.

El martes 9 de julio del año en curso, alrededor de las 11:30 de la mañana, me llamó desde Bogotá para contarme sobre su salud: estaba bastante estable y los especialistas consideraban que podía viajar y regresar a Bogotá para cumplir los controles médicos.

Me preguntó qué tanto había avanzado en los trabajos de investigación y se alegró mucho, al decirle que había adelantado bastante, entonces respondió: “Cuando regrese a Riohacha, comienzo a revisar textos para publicar los libros, poco a poco”.

La triste noticia

Francisco Justo Pérez van-Leenden. (Fotografía archivo personal Gladis Brugés Moreu)

El 13 de julio, a las 7:00 de la noche, al salir de la Catedral ‘Nuestra Señora de Los Remedios’, después de la misa de un mes de fallecida la señora ‘Goya’ de Fonseca, recibimos la triste noticia del fallecimiento inesperado de alguien tan optimista que deseaba regresar a su terruño, para continuar con su labor diaria.

Falleció Justo Pérez”, eso publicaban los integrantes de los grupos de WhatsApp, a través de nuestros celulares. ¡No lo queríamos creer!

Es imposible, no puede ser”, decíamos todos al mismo tiempo, en el Parque Padilla, frente a la catedral.

¿Qué hacemos?... ¿A dónde vamos? Meditamos por un instante y dijimos: “Vamos a la casa de ‘Joaco’. Donde Joaquín Jiménez, ellos deben saber”.

Justo, hoy 13 de agosto hace un mes de tu partida y las palabras son pocas para manifestarte mis sentimientos de gratitud. En vida te lo expresaba y ahora con más razón porque ya no estás físicamente con nosotros.

¡Gracias, gracias, gracias por permitirme aprender de ti!

Descansa en Paz.

1 comentario:

  1. Excelente sin duda alguna una gran persona, sin egoísmo para compartir su conocimiento.

    Se perdió una gran individuo de los que hace tanta falta a este departamento.

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