¡Hasta la Naturaleza Protestó!

Sucedió un Domingo de Resurrección

Serie 'Diez Notas Sobrenaturales'
Nota Número Tres

¡Bienvenidos!

Marcos Antonio Barros Pinedo
Por  Marcos Antonio Barros Pinedo

Esto que les voy a contar, sucedió un Domingo de Resurrección.

Fue al final de la Semana Santa hace más de 40 años, en el Distrito de Riohacha.

Un buen número de personas entre hombres y mujeres desde las 05:00 de la mañana fueron partícipes de la Santa Misa en la Catedral 'Nuestra Señora de Los Remedios', oficiada por el Obispo del entonces Vicariato Apostólico de Riohacha, Livio Reginaldo Fischione.

Después de la bendición del fuego y los actos litúrgicos, los feligreses esperaban la procesión de la imagen de Jesucristo Resucitado, que debía salir de la Catedral, para encontrarse con la imagen de la Virgen María.

El propósito era que se hiciera la Tradicional Cortesía con las dos imágenes, en la Calle Tercera con Carrera Sexta, esquina.

Lo que sinceramente sorprendió a los feligreses a esa hora de la mañana fue un tremendo frío producido por el nordeste, proveniente del Mar Caribe. Sin embargo, la gente estaba tranquila.

De repente un feligrés de más de 50 años llegó desesperado a la catedral, clamando y pidiendo misericordia a Dios con fuerte voz, porque  las olas del Mar Caribe estaban furiosas, las palmeras de los cocoteros se movían incesantemente, al vaivén de la fuerte brisa marina y el frío, era casi insoportable.
Ante esta situación, el Padre Tarsicio de Ripacorbaria tomó la decisión de no sacar la imagen del Cristo Resucitado, pero los feligreses no estuvieron de acuerdo y le pidieron al sacerdote italiano que reconsiderara su determinación, quien aceptó la solicitud.

Procesión de Jesús Resucitado, en Riohacha

Pero, cuando la imagen de Jesucristo Resucitado salió de la Catedral cargada por Eduardo  'Báculo' Arredondo y 'Tabaco' Obediente, en la parte delantera; 'Chombito' Serrano Gómez y Charles Robles Zambrano, en la parte de atrás, la sorpresa para los católicos que asistían a la procesión, fue que la banda de músicos le cambió la marcha al Resucitado, que tiene una tradición de más de cien años.
El abogado riohachero, Álvaro Romero Effer fue el primero en protestar por el cambio de la marcha. La gente respaldó la actitud de Romero Effer.

Fue entonces cuando el abogado, (ya fallecido), de manera enérgica y en medio del tremendo frío, le dijo al director de la banda de músicos, Juan Gámez:

"Por favor, toque la tradicional marcha del Resucitado. Esa marcha que suena, no es la tradicional de esta imagen sagrada", a lo que el aludido respondió: "Álvaro, usted manda en la iglesia y en mi banda de músicos, mando yo".

Cuando la banda reanudó la marcha inaceptada por Álvaro Romero Effer y los cientos de feligreses, la imagen del Cristo Resucitado se tornó mucho más pesada a las cuatro personas que la cargaban.

Nuevamente, 'casi fuera de sus casillas', Álvaro Romero Effer, ordenó parar la procesión y le repitió a Juan Gámez, que le tocara la marcha tradicional a la imagen, porque si no lo hacía, los que la cargaban, no darían un paso más.

Juan Gámez le respondió de la misma manera a Álvaro Romero Effer: "Usted manda en la iglesia, pero en mi banda de músicos mando yo".

Ante esta tensa situación religiosa, correspondió a los feligreses tomar partido y se fueron en contra de la decisión de Juan Gámez, que se vio obligado a decirles a los músicos: "Muchachos toquemos la marcha tradicional del Cristo Resucitado".

Apenas comenzó la marcha tradicional y la imagen salió del atrio de la Catedral, el peso de la imagen regresó a su normalidad, aseguraron los cuatro cargadores, el fuerte frío desapareció, las embravecidas olas del Mar Caribe se calmaron y las palmeras con sus cocoteros también dejaron de moverse fuertemente, al vaivén de la brisa marina.

La Virgen María y Cristo Resucitado

La procesión y la cortesía de las imágenes del Cristo Resucitado y la Virgen María se realizó con éxito y el fuerte aplauso de los feligreses católicos, tanto hombres como mujeres, no se hizo esperar.

Lo más importante fue que cuando la procesión se recogió y en presencia de más de 400 personas, Juan Gámez y Álvaro Romero Effer se dieron un fuerte abrazo. De esta manera  le hicieron honor a la gallardía del hombre riohachero.

¡Cómo se pasa de rápido el tiempo. Qué importante es recordar. Y ...Pare de Contar!

Título Original: Sucedió un Domingo de Resurrección

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2 comentarios:

  1. Desconocía de esa historia gracias Marcos por compartirla. Pregunto aún existe esa tradición? Interesante.
    Saludos desde Barrancabermeja Santander.

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    Respuestas
    1. Buenas tardes amigo Elias Salazar. Soy la periodista Rosa López Arredondo, Webmaster de este Blog. Si señor La tradición existe en Riohacha (La Guajira). Muchas gracias por leer nuestros contenidos y comentar. Saludos y miles de bendiciones para usted y los suyos.

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