Viceministro de Educación Preescolar, Básica y Media se reunió con directivos de Asodegua

Viceministerio de Educación se comprometió con la defensa de los etnoeducadores del departamento de La Guajira

 

Una reunión de seguimiento a la Primera Mesa Técnica del sector educativo celebrada en la ciudad de Bogotá, se llevó a cabo en Riohacha, a la cual, los invitados principales fueron los miembros de la Junta Directiva de la Asociación de Trabajadores de la Educación en La Guajira (Asodegua), la cual fue dirigida por el viceministro de Educación Preescolar, Básica y Media, Edgardo Bayona.

En el encuentro, realizado en la ciudad de Riohacha, participaron también Farides Pitre, Olga Lucia directora de cobertura del MEN; el representante de La Guajira en la junta directiva de Fecode, Fabio Herrera Martínez;  y representantes de los etnoeducadores que labora en los cuatro entes certificados.

El profesor Fabio Herrera, ejecutivo nacional, y la secretaria de Asuntos Étnicos, Laborales y Juridicos, Yazmine Fernández, se encuentran gestionado del cumplimiento de las sentencias SU-245 y la T-390 del 2021, además de lo contemplado en la Ley General de educación, ley 115, del 94, del decreto 450 del 2022, decreto de salario.

Todo lo anterior enmarcado en la exigencia de asimilación y aseguramiento laboral, salarial, prestacional y de garantías laborales para los más de 3 mil maestros y maestras etnoeducadores del departamento de La Guajira para que sean asimilados en el estatuto 2277, salvaguardando así sus derechos laborales y salariales y du estabilidad laboral.

Una de las conclusiones de la reunión, después de haber escuchado atentamente la descripción sobre la realidad a la que se exponen hoy los etnoeducadores ante el maltrato, el acoso, la extorsión y la intimidación por parte de algunas autoridades tradicionales y de algunos directivos de los centros etnoeducativos, el viceministro y su comisión, se comprometieron a emitir una circular, donde se le solicite a las entidades territoriales certificadas en educación La Guajira, a adelantar las acciones que posibiliten el cumplimiento de las sentencias antes mencionadas y se extermine el trato ignominioso del que son objeto los etnoeducadores.